viernes, 18 de febrero de 2011

Radiohead, The Kings Of Limbs, 2011: ¿Música o Experimento? ¿Las dos cosas o ninguna?

Nadie en su sano juicio podrá negar la importancia en la industria musical de Radiohead en los últimos 20 años. Tampoco nadie puede contradecir el hecho de que Thom Yorke es uno de los más importantes referentes creadores artísticos contemporáneos.
Lo que sí puede caer en discusión es si Radiohead sigue teniendo el mismo efecto al escucharlos. En mi caso particular es evidente que no. Sonará trillado decirlo pero siempre me quedaré con la primera etapa de la banda, sus tres iniciales obras maestras son irrepetibles.
Luego de eso la banda tomó un giro mucho más introspectivo, donde la densidad era sin duda uno de los elementos predominantes.
A eso hay que agregarle que Radiohead es una banda que siempre está en busca del cambio, de la renovación, lo cual conlleva ciertos riesgos.
Hace mucho que Radiohead dejó de ser una banda de rock, lo cual no es malo, depende desde que punto de vista se analicen las cosas. Se transformó en una banda experimental y muchos más "íntima".
Pero en los últimos trabajos de la agrupación inglesa la experimentación llegó a límites inimaginables, lo cual produjo que mucho de lo que últimamente entregó la banda sea difícil de digerir para quien lo escuchaba.
Hoy la banda ha lanzado su nuevo trabajo The Kings Of Limbs, que sigue confirmando lo anteriormente descrito. El rock fue dejado de lado casi en su totalidad por la banda, para convertirse en un sonido referencial que complementa toda la gama que ofrece el grupo.
Siendo honesto, el disco no me remece, no me conmueve, hace tiempo que Radiohead dejó de tener ese efecto sobre mí.
La placa inicia con Bloom, un track que basa su propuesta en una percusión repetitiva hasta el hartazgo que casi marea, a pesar de ello la voz de Yorke salva la canción. Algo similar ocurre con Feral, el cuarto sencillo del álbum, aunque en este caso hay un poco más de "velocidad".
Morning Mr Magpie mejora un poco, pero muy poco, la impresión inicial del disco, posee más ritmo que el primer track aunque luego cae por momentos en aquella densidad ya tan acostumbrada en la banda.
Y así llegamos a los mejores momentos del álbum, Little By Little es sin duda de lo mejor de este trabajo, un single menos experimental, es la canción mejor construida de toda la placa, se percibe más a la banda como tal, como un conjunto.
En ese senda también se encuentra Lotus Flower, que a su vez es el primer video de este nuevo trabajo, a pesar de no ser un extraordinario tema respeta la esencia original de la banda, lo cual no es poca cosa.
Siempre en un disco de Radiohead hay espacio para la melancolía "Thom Yorke Marca Registrada" que puede llegar (si uno no está preparado) a adormecer al oyente, y así lo demuestran primero con Codex, un track casi instrumental (Yorke no canta sino que emite su ya clásico e inconfundible gémido lastimero) y en segundo lugar Give Up The Ghost, donde Yorke sí canta, en realidad hipnotiza, o quizás en algun caso, como decía, arrulle y duerma a quien lo escuche.
El cierre del álbum es menos somnífero con la cadenciosa Separator, otro track agradable sin ser espectacular.

Radiohead ha vuelto, aunque noto una sutil repetición con respecto a In Rainbows su anterior producción. En realidad esa densidad, esas ganas de excederse en ser experimental vienen desde principios de este siglo. Al escuchar este disco se me viene a la mente Pyramid Song que formó parte del Amnesiac (2001). Es decir esta propuesta no es nueva pero al menos es muy diferente a lo que habitualmente ofrece la industria de la música.
The Kings Of Limbs es un álbum que será apreciado por los verdaderos fanáticos de la banda, los que aman a Yorke y Cia. se sentirán extasiados al escuchar este trabajo. A mí en lo particular no me estremeció ni mucho menos, es más, en algunos momentos siento al escucharlo que me encuentro en un extenso letargo.
No obstante si algo puede respetarse de la banda es que son fieles consigo mismos, hacen lo que quieren hacer y no lo que impone el mercado y eso en estos tiempos es muy poco común.
En conclusión, los fans de Radiohead estarán complacidos y felices, el resto... no estoy seguro.


Lotus Flower




Little By Little




miércoles, 2 de febrero de 2011

Pearl Jam, Live On Ten Legs, 2011: La Calidad Intacta

Muy pocas bandas de rock pueden jactarse de sobrevivir con dignidad en el tiempo. Un grupo perdura no sólo por el hecho de editar discos contínuamente (esto no es necesariamente garantía de calidad musical), en realidad esa permanencia en el tiempo está referida más bien a que estas bandas cada día se reinventan, se adaptan y siempre tratan de ofrecer algo novedoso, prefieren antes que hacer lo que la industria musical manda realizar algo que los complazca a ellos mismos, es decir, que se sientan orgullosos y felices de crear nueva música y no sentirse obligados por un contrato discográfico o por la necesidad de permanecer siempre vigentes.
Pearl Jam es una de esas agrupaciones que se encuadra perfectamente en el concepto antes descrito. Una banda que disco tras disco, años tras año nos sorprende ya que no se repite y siempre no da algo nuevo que probar para nuestro paladar musical. Y en más de una ocasión ese ánimo experimental de no querer auto-copiarse ha traído como consecuencia que muchos fans se hayan alejado o prefieran el estilo clásico noventero del grupo de Seattle. Eso lo sabían los integrantes de la banda, y aún así siempre prefirieron sentirse honestos y cómodos consigo mismos antes que complacer a la escena musical, tan venida a menos últimamente.
Y para confirmar que PJ sigue siendo la banda de culto más amada del planeta nos ofrecen su ultima producción en vivo titulada Live On Ten Legs, que no es sino una recopilación de temas de casi toda su trayectoria en vivo cuyas performances fueran realizadas desde el 2003 hasta el 2010 en distintas presentaciones a nivel mundial, es decir la era "madura" de Eddie Vedder y Cia.
Este trabajo viene a representar algo así como la segunda parte del Live on Two Legs, el anterior recopilatorio en vivo editado en 1998 y que marcó el debut de Matt Cameron como batero de PJ.
La nueva placa en realidad sólo confirma lo que los seguidores de la banda sabemos, que PJ sigue siendo una de las mejores bandas en vivo y que suena tan bien como si uno escuchara una producción de estudio.
A lo largo de los 18 temas que componen este álbum encontraremos un poco de todo. En primer lugar PJ interpreta muchos de sus ya clásicos himnos como World Wide Suicide, I Am Mine, Rearviewmirror, Nothing As It Seems, Jeremy, Spin The Black Circle y Alive. En estos tracks quizás ya no notamos la explosión de antaño al interpretarlas pero eso no quita que sean performances de gran calidad llenas de poder y contundencia.
También hay lugar para los nuevos temas que ya se han convertido en favoritos de los fans como Just Breathe, The Fixer y Unthought Known, este último un temón de aquellos.
Pero siendo objetivos también hay alguna versión algo flojita como Animal, tema al que Vedder le imprime toda su energía pero en el que uno percibe que el resto de la banda no hace lo mismo. Aún así es aceptable el track escogido, aunque existen mejores versiones.
A su vez dejaron espacio para sus más consagrados "lados B" como son State of Love And Trust y Yellow Ledbetter, tema este último con el que cierran casi todas sus presentaciones y una de las canciones más emblemáticas de la banda a pesar de no pertenecer a ninguno de sus 9 discos de estudio.
Y como siempre hay lugar para los covers, en este oportunidad nos ofrecen dos versiones, la primera, que es con la que abren el disco, es Arms Aloft original de Joe Strumer and The Mescaleros, y la otra es Public Image perteneciente a Public Image Ltd. la banda del ex Sex Pistols John Lydon (Johnny Rotten). Ambos covers son la prueba más fehaciente de la versatilidad de PJ y que ninguna canción les queda grande.
Por último y como momento especial para los fans sudamericanos, nos ofrecen Porch interpretada en una de las dos de las fechas en la cancha de Ferro, Buenos Aires, uno de los mejores conciertos que ha realizado la banda en toda su trayectoria.

De otro lado, algunos seguidores pensaron que al ser la "continuación" del recopilatorio de 1998, en esta oportunidad el disco estaría más enfocado en tracks pertenecientes a álbums posteriores al Yield. Esto no fue así, por lo cual me pregunto, ya que es una revisión de toda la carrera, ¿Por qué no eligieron algún tema de ese magnífico álbum llamado No Code"?
Otra observación, más cercana a lo sentimental, es el hecho de que el disco pudo haberse llamado Live On Twelve Legs, considerando que la presencia en los teclados de Boom Gaspar se ha hecho vital en la segunda mitad de vida de PJ y es considerado el sexto jammer.

Aún con estas minúsculas observaciones, no queda duda que estamos frente a un discazo con todas sus letras, un buen comienzo para lo que será este año cargado de novedades en cuanto a PJ y sus 20 años de existencia. Porque habrán pasado dos décadas pero la calidad está intacta.

Este es la lista de temas y a que recital o concierto corresponden:

1. Arms Aloft
(Werchter, Belgium, July 4 2010)

2. World Wide Suicide
(Prague, Czech Republic, September 22 2006)

3. Animal
(Bern, Switzerland, September 13 2006)

4. Got Some
(San Diego, CA, USA, October 9 2009)

5. State of Love and Trust
(London, England, June 25 2010)

6. I Am Mine
(Brisbane, Australia, November 10 2006)

7. Unthought Known
(Berlin, Germany, June 30 2010)

8. Rearviewmirror
(Perth, Australia, November 25 2006)

9. The Fixer
(Boston, MA, USA, May 17 2010)

10. Nothing As It Seems
(Adelaide, Australia, November 22 2006)

11. In Hiding
(San Francisco, CA, USA, July 18 2006)

12. Just Breathe
(Belfast, Ireland, June 23 2010)

13. Jeremy
(London, Canada, September 12 2005)

14. Public Image
(Venice, Italy, July 6 2010)

15. Spin the Black Circle
(Hamilton, Canada, September 13 2005)

16. Porch
(Buenos Aires, Argentina, November 26 2005)

17. Alive
(Philadelphia, PA, USA, October 31 2009)

18. Yellow Ledbetter
(Berlin, Germany, June 30 2010)


Public Image