viernes, 28 de octubre de 2011

Bush, The Sea Of Memories (2011): El tibio retorno

El movimiento alternativo de los 90's, en particular el "grunge" (término casi menospreciado por sus supuestos intérpretes), no sólo abarcó Estados Unidos sino que se expandió a regiones más alejadas. Quizás los casos más representativos son dos, el primero en Australia que tuvo a Silverchair como los abanderados de aquel sonido y en el viejo continente, en Inglaterra para ser más precisos, la banda Bush fue la agrupación de grunge o post-grunge por excelencia en Europa por algún tiempo. Mientras Silverchair este año decidió dar por terminada su carrera, Bush después de 10 años sin producir ningún álbum de estudio, decidió editar The Sea Of Memories.
Nadie puede negar el efecto que tuvo el disco debut de la banda inglesa allá por 1995, Sixteen Stone fue la muestra más palpable que hasta en Europa había cantantes que querían sentirse Eddie Vedder al menos por un instante. Fue un primer disco que marcó mucho por sus canciones potentes con instantes melancólicos, ese sonido que gustaba tanto por aquellos tiempos, sonido que ya estaba por morir ya que Kurt Cobain había fallecido un año antes.
Nunca más Bush lanzó un disco que produjera el impacto del primero, aún así pudieron mantenerse a flote por algunos años. En el 2001 publicaron su último álbum de estudio, posteriormente aparecieron recopilatorios y ediciones en DVD para tratar de mantener viva a la banda.
Es así que llegamos al presente año y aunque sólo quedan dos integrantes fundadores de la banda (Gavin Rossdale y Robin Goodrigde), han tratado de respetar el sonido que ofrecieron en su corta carrera discográfica.

The Sea of a Memories empieza su camino con The Mirror of The Signs, tema que posee fuerza y ritmo y donde se aprecia la voz de Rossdale intacta.
The Sound Of Winter el segundo track es de lo más llamativo del trabajo, es el primer momento destacado de álbum, que nos trae a la memoria la propuesta que hizo famosa a la banda. Rock alternativo.
Siguiendo el recorrido All My Life ofrece por momentos guitarras distorsionadas que acompañan la voz de Rossdale, el single más que nada mantiene la línea de sonido inicial del disco.
The Afterlife es un track en donde vale la pena detenerse, una canción ligera que coquetea con el pop rock y que recuerda algunas de las inclinaciones que también ha tenido una de las bandas que más lo influenció, Pearl Jam.
La melancolía tiene su espacio con All Night Doctors, en donde el piano le da la atmósfera perfecta para que el tema trascienda. Una canción simple y de calidad a la que en el transcurso de la misma se le añaden la guitarra eléctrica y violines brindando así un tema más completo.
El sexto track Baby Come Home devuelve al disco a la ruta del rock ligero, sin estridencia pero a su vez sin llegar a levantar el vuelo. Canción que sirve para completar espacio, rellenar, y nada más.
Otro tema liviano encontramos con Red Light, en donde incluso la voz de Rossdale también se suaviza, otro instante de pop rock.
She's a Stallion endurece sólo por momentos la propuesta general del disco, un track rítmico y punto.
Otro instante interesante del disco es I Believe in You, en donde ese rock ligero que predomina en la placa se ve potenciado por las guitarras y la batería.
En Stand Up prácticamente la música, los instrumentos, pasan a un segundo plano para que Rossdale demuestre su capacidad vocal.
The Heart Of The Matter es un tema más oscuro que el resto (ya era hora de que eso sucediera), más rock y dureza.
El cierre del álbum es el momento más experimental del mismo, en Be Still My Love se aprecia a la banda más completa. En un track denso que se distingue del resto del álbum.

Y así pues Bush ha vuelto, no ha remecido estructuras ni nada que se le parezca, al menos ha logrado traernos un poco de rock alternativo en tiempos en lo que casi todo suena igual (lo cual es paradójico, teniendo en cuenta que Bush al nacer sonaba a muchas bandas de Seattle).
La banda de Gavin Rossdale ha regresado y veremos como le va, no nos ofrece un disco contundente, tampoco olvidable del todo, es simplemente un tibio retorno.

The Sound Of Winter




All My Life




All Night Doctors










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