miércoles, 21 de septiembre de 2011

Pearl Jam Twenty: Nunca el cine fue tan HUMANO

Es increíble como algo tan simple como ir al cine puede convertirse en todo un acontecimiento que supera las barreras de lo emocional y que queda guardada como una experiencia irrepetible e inolvidable. Eso sucedió la noche de ayer, donde en muchas partes del mundo se pudo disfrutar del estreno de "Pearl Jam Twenty", el documental dirigido por el genial Cameron Crowe, que nos lleva a un hermoso paseo por los 20 años de legendaria banda de Seattle.
Pero en mi caso, como el de muchos de los que asistieron a ver la proyección en Lima, no sólo era el hecho de ver la película más esperada del año, y quizás de todas nuestras vidas, sino que el simplemente hecho de ir al lugar, a la sala de cine constituyó toda una aventura. Tuve que trasladarme hasta el centro comercial donde veríamos el film, era el único lugar donde se proyectaría y estaba al otro lado de la ciudad. Para esto conté como siempre con la compañía de mis dos musas jammers que siempre me acompañan en este tipo de aventuras. En realidad el traslado fue menos pesado de lo que imaginé y entonces, ya estando en el lugar, tuvimos tiempo para ir preparándonos emocionalmente para lo que vendría después, para lo que veríamos en pantalla gigante, aunque eso fue imposible, la emoción superó cualquier tipo de expectativa previa.

Minutos antes del inicio de la proyección de la película, ya con nuestros boletos en mano y sentados cómodamente nos aprestamos a ver el documental más importante que jamás hayamos visto. Y así fue, Pearl Jam Twenty, como dije antes, es un recorrido emotivo pero también contundente, sobre las dos primeras décadas de la banda que más amamos.
En sí la película refleja el espíritu de la banda, es sencilla, no exalta a la banda de una manera exagerada sino que la pone frente a nuestros ojos como lo que son, seres humanos con sus defectos y virtudes y como fueron madurando y aprendiendo a convivir entre ellos mismos, y en especial con la fama, y que a pesar de las adversidades pudieron seguir juntos, no sólo como banda sino como amigos, como familia.

El documental tiene momentos claves en cuanto a la narración de los acontecimientos, desde el inicio, con una merecida referencia al inicio de todo, al germen de la banda, es decir Mother Love Bone o como le llamo yo "la Madre de Pearl Jam". Podemos observar lo que significó la presencia el desaparecido Andrew Wood, el líder y vocalista de MLB, para el posterior fenómeno musical de los 90's, pero no sólo su aporte como músico o vocalista sino también y por sobre todo como persona y esto se aprecia claramente en las palabras de Chris Cornell, líder de Soundgarden, que casi al borde de las lágrimas recuerda a su entrañable amigo. Luego de ello ya la historia es conocida por todos, la llegada de Eddie Vedder y la formación de la banda, el nacimiento de Pearl Jam.
Otro de los momentos cumbres, realmente fuerte, del film es cuando Eddie Vedder, en pleno concierto, cambia de actitud, de carácter, el joven tímido se transforma y arremete con total furia cuando se percata de que uno de los asistentes al recital era maltratado al querer ser desalojado del recinto. Es ahí el punto de quiebre, ya que en dicha escena vemos el cambio de expresión en su rostro, en su voz, en ese momento había nacido "la voz de los 90's".
Las emociones van y vienen sin detenerse a lo largo de la película y vamos viendo como la banda crece y se fortalece en el camino, proceso que no fue fácil y en donde hubo momentos en que parecía que todo se iba al tacho. Dentro de esas situaciones emotivas hay algunas que en lo personal me marcaron y mucho. No cabe duda que la referencia a Kurt Cobain y su relación del supuesto amor-odio entre Nirvana y Pearl Jam fue uno de los instantes que más destacó, llegando al éxtasis total con el "baile" entre Kurt y Eddie tras bastidores de los MTV Video Music Awards 1992, mientras Eric Clapton en el escenario interpretaba "Tears in Heaven". Fue la reconciliación para una rivalidad que prácticamente no existió, al menos de parte de Vedder.
La tragedia de Roskilde en el 2000 fue lo más abrumador y penoso que aconteció en su carrera, ver el desencajado rostro de Vedder en la pantalla gigante de aquel festival danés, fue sobrecogedora. Esa imagen yo no la veía desde el año en que se produjo.
Eddie también relata con mucho cariño la relación de amistad que tiene con Jeff Ament, no necesita decir mucho para que uno lo entienda, su emoción y esos silencios que Vedder siempre tiene cuando no encuentra las palabras para describir lo que siente es más que suficiente.
Pero el relato más emocionante fue la descripción de historia de Release, Vedder y su padre, de lo que le produce la canción al interpretarla, de como a pesar de no haber compartido momentos padre-hijo, lleva a su progenitor en el corazón y en el alma. Similar sensación nos deja el escuchar el relato de Eddie sobre lo que siente cada vez que canta Black, la historia del amor perdido que Vedder vivió en carne propia y que recuerda cada vez que la interpreta.
Otro fragmento importante es la referencia que se hace a la amistad entre bandas, de como Pearl Jam y Soundgarden convivieron sin competir, siendo bandas hermanas (Temple Of The Dog) queriéndose y respetándose. Situación que fue comparada con las rivalidades entre las bandas de punk de New York, en donde ese tipo de convivencia era imposible, como lo comentaba Johnny Ramone, según relata Chris Cornell.
Pero también hay espacio para los momentos divertidos, y así es que abordaron el espinoso "tema del baterista", explicando uno por uno el porqué del cambio de bateros en la banda. Y lo hicieron en menos de 2 minutos, casi de manera sarcástica, demostrando que no hay que darle tanta importancia a una situación que para ellos ya fue superada con los 13 años que tiene Matt Cameron en la banda. O también, la anécdota de Stone Gossard y el Grammy que tenía guardado en su sótano como todo lo que no le sirve.
También hay un espacio para los hechos vergonzosos (aunque jocosos), como lo fue su presentación en la fiesta de promoción del film Singles de 1992 también dirigida Cameron Crowe, y como la banda, en especial Eddie, en total estado de ebriedad realiza la peor performance de su carrera.

La cinta hace reseñas personales de cada uno de los miembros, en muchos casos ilustradas con películas caseras lo que acerca más al público a la banda, los vemos como seres humanos no como estrellas de rock. Y obviamente también nos lleva por un paseo a su discografía, en especial sus siete primeros trabajos, ya que en los dos últimos (Pearl Jam y Backspacer) la banda ya estaba totalmente establecida sin mayores obstáculos que entorpecieran su trabajo.
No podía faltar el ángulo político-social, su lucha contra Ticketmaster, su participación en los conciertos y festivales a favor de la Liberación del Tibet, sus críticas al régimen de Bush, etc., todo esto corriendo el riesgo de perder fans en el camino, cosa de la que eran conscientes pero nunca dejaron de ser consecuentes con sus ideas y postulados.

Pearl Jam Twenty fue sin duda más de lo que esperaba, me dio más de lo que pensé, y mis expectativas eran enormes. Mientras las veía, percibí las emociones del resto, vi lágrimas, suspiros femeninos (en especial cada vez que Eddie hacia aparición), risas, y muchas sensaciones más. Me pregunto yo, qué película puede lograr todo eso, ¿cuál?.
No sólo lo fue para mí fue una experiencia única, también lo fue para mis compañeros de fanatismo que compartieron conmigo la sala y sus posteriores opiniones, no habiendo ninguna, sí, ninguna objeción al film. Nunca comenté con tantas personas una película y más aún jamás todos habíamos quedados satisfechos, eso sólo lo vi anoche y creo que nunca más lo veré.

Pero nada de esto sería posible sin la prodigiosa mano de Cameron Crowe, el hombre que sabe más de Pearl Jam que el propio Pearl Jam, supo recopilar toda la información, en especial la visual, condensarla, editarla y sobre todo supo contar la historia, transmitirla, y con ello extasiar al fan al mostrar el lado más humano de la banda. Las filmaciones caseras, a las que hice mención antes, son fundamentales para humanizar aún más este trabajo. Ver a un pequeño Eddie Vedder emocionó a más de uno, y sobre todo de una. Por momentos sentí que presenciaba la historia de PJ al estilo de "Los Años Maravillosos", el relato nostálgico y emotivo caracteriza toda esta obra.

Sé que sonará hereje, pero PJ20 equivale a La Biblia del jammer y Cameron Crowe la "escribió" para nosotros. Gracias a ambos, a la banda, por existir y regalarnos estos 20 años de música y honestidad, y a Cameron Crowe porque sólo él podía llevar a cabo este trabajo, ya que realizó una radiografía del grupo sin demasiada pompa, no poniéndolos en un pedastal, simplemente describiéndola tal como es, con lo bueno y lo malo, lo lindo y le feo, mostrando el lado más íntimo y visceral de esta agrupación, ayer más que nunca el cine fue tan auténtico, tan personal, tan cercano y sobre todo tan humano como anoche. Gracias Cameron por ello.

Seguramente me quedan muchos detalles sin contar, pero al menos he tratado resumir los que más efecto produjeron en mí (me olvidaba de la interpretación de Better Man en el 2009, el el desprecio que sentían y sienten hacia el término "grunge"). Después de toda esta experiencia regresé a casa, y el tema siguió siendo el principal tópico en la red social, me costó dormir, pero lo pude conseguir, y sólo para soñar con el siguiente paso, la siguiente fecha, el 18 de noviembre, y si el solo hecho de ver una película me causó todo esto, no puedo imaginar lo que me producirá tenerlos frente a mí.


* Cabe agregar que en la edición especial para Blue Ray y DVD contiene mucho más material para deleitarnos, atentos a eso entonces.

jueves, 15 de septiembre de 2011

Red Hot Chili Peppers en Lima: Rojo, caliente, picante y vigente

Tengo una mezcla de sensaciones luego de poder ver a los legendarios RHCP en mi ciudad. Lo primero que siento es satisfacción por saldar una de las tantas deudas con mi alma rockera, un grupo que conocí hace tantos años (décadas) y que es parte fundamental de mi formación musical. Pero también tengo una sensación extraña de que pudo ser un mejor espectáculo, más allá del sonido por momentos defectuoso del recital de anoche. Aún así creo que son más los recuerdos positivos que los negativos que quedaron en mi memoria musical.
El grupo ofreció un corto (poco más de hora y media) pero efectivo recorrido a su basto repertorio de casi 30 años, aunque centró su presentación en su último trabajo "I'm With You" y también en su placa más aclamada "Blood Sugar Sex Magik" que está por cumplir nada menos que 20 años de lanzamiento.
Era evidente por este motivo leer o escuchar voces posteriores que mostraron cierta insatisfacción porque faltó tal o cual tema. Pero el tiempo del concierto y además el hecho de que el fanático limeño no ha dejado de ser un "fan de hits" hacen que no me extrañe para nada dicha reacción entre muchos de los asistentes al evento de anoche.
El repertorio fue, no obstante, digno de escucharse, con momentos impecables como la clásica y obvia Under The Bridge, Throw Away Your Television, Higher Ground, By The Way, Sir Psycho Sexy, Give It Away (el cierre) pero sin duda considero que el momento cumbre, que fue donde el público se conectó con la banda, fue la interpretación de Around The World, tema que no era tocado por la banda hace mucho tiempo y que Lima tuvo el honor de recibir entre su repertorio. Un noche con mucho funk, justamente por centrar mucha de su atención en su obra maestra de 1991. Así que por ese lado al menos de mi parte no hay queja, quizás como muchos, hubiera querido escuchar una canción en particular, mi favorita Soul To Squeeze no estuvo presente pero eso no le quita valor al repertorio.
Hablando de la banda en sí, pues tenemos a un Anthony Kiedis que sigue en lo suyo, gran "frontman" no tanto por su capacidad vocal (nunca fue uno de mis cantantes favoritos), pero fue cumplidor y físicamente impecable, se mueve como hace casi 30 años, y se adueña del espectáculo.
Muchos ojos estuvieron puestos en el nuevo integrante Josh Klinghoffer, el guitarrista cumplió su labor de manera aceptable pero no cabe duda que hace todo lo posible por parecerse a su antecesor John Frusciante, tanto en su estilo de tocar, la manera en realizar los coros y ciertos movimientos corporales. Josh es un "proyecto de Frusciante", era muy evidente. Musicalmente cumplió con su trabajo y hasta ahí no más.
Chad Smith hizo muy bien su labor con las baquetas, poniéndole el ritmo necesario a cada canción, y cabe destacar también la participación del percusionista invitado (además de un tecladista) que complementaba de manera perfecta la performance de Chad y hacían que la banda sonora más completa.
Capítulo aparte para Flea, el amo del bajo demostró que es el alma de esta banda, fue el nexo entre ellos y el público. Por momentos hablando en español (gracias por "the ceviche") y coronándose poniéndose un peruanísimo chullo. A su vez ofreció algunos pequeños solos donde demostró aún más su ya comprada calidad musical.
Tampoco quería olvidarme de meccionar a los teloneros de anoche, Foals, excelente banda inglesa que ofreció su indie rock sencillo, melódico y de calidad. Gratísima sorpresa, y gran performance en vivo.
La parte negativa como ya lo había indicado está en la corta duración del concierto, además de problemas de acústica y sonido (una crítica recurrente el día de hoy). Pero lo que más molesta no viene por parte de la banda sino de nosotros mismos como público, los limeño seguimos siendo fríos, por momentos la gente literalmente se paga (no digo que saltan como locos, simplemente que noto en ciertos casos hasta indiferencia con el artista), felizmente no sucede con todos, pero seguimos siendo una "audiencia de grandes hits" y eso espero que algún momento cambie.

En líneas generales, y a pesar algunas deficiencias, un concierto muy bueno, lejos eso sí de los mejores que se han ofrecido en Lima. Que estas lecciones nos sirvan para crecer como público, para conectarnos más con el artista que viene a deleitarnos.
Gracias a Red Hot Chili Peppers por una noche de funk, de rock y recuerdos. Demostraron que a pesar de todo están vigentes.

Foto (Fuente: El Comercio)

1) Monarchy Of Roses
2) Can't Stop
3) Charlie
4) Under The Brigde
5) Ethiopia
6) Dani California
7) The Adventures Of Rain Maggie
8) Throw Away Your Television
9) Factory Of Paith
10) Grand Pappy Du Plenty ("Tease")
11) Around The World
12) If You Have To Ask
13) Right On Time
14) Look Around
15) Higher Ground (cover de Stevie Wonder)
16) Californication
17) By The Way
18) Dance, Dance, Dance (con un previo solo de Chad)
19) Sir Pyscho Sexy
20) The're Red Hot (cover de Robert Johnson)
21) Give It Away

lunes, 5 de septiembre de 2011

Pearl Jam Destination Weekend, nuestro amigo Gary y la noche en que nos fuimos al carajo

Hay cosas en la vida que no se pueden explicar, y precisamente anoche sucedió una de esas situaciones. Como todos los jammers (seres humanos que llevan a Pearl Jam en la sangre y el alma) sabíamos que el fin de semana que pasó se llevaría a cabo el esperado "Pearl Jam Destination Weekend", el festival que conmemoraba las primeras dos décadas de existencia de la legendaria banda de Seattle. El lugar para dicho evento fue el Alpine Valley Music Teather en Wisconsin. Dicho festival contó además con la presencia de bandas y artistas invitados de la talla de Mudhoney, Queens Of The Stone Age, The Strokes y más, muchos más.
Al encontrarme tan lejos de este tremendo acontecimiento se generaron dos sensaciones en mí, la primera, envidia sana (si es que eso puede existir) hacia los que estaban presentes como público de ese fin de semana mágico, y la segunda, ansiedad, la ansiedad generada por encontrar un bendito "stream" que nos permitiera a los jammers acercarnos al menos virtualmente al escenario y compartir ese momento tan especial.
El sábado en la noche encontramos un stream, no era lo mejor del mundo, se trataba de una persona que transmitía a través de su celular lo que acontecía en la presentación de Pearl Jam. Este chico se llama Gary e hizo algo que no creo que aquí ni en el resto de sudamérica se pueda hacer, filmar sin que nadie te lo cuestione, eso en gran medida se debe a la idiosincrasia del fan "gringo", mucho más pasivo y acostumbrado a su vez a ver a Pearl Jam las veces que quiera. Gary no habría podido hacer eso en estos lares, si lo hubiera hecho por ejemplo en Buenos Aires no saldría "vivo". Pero bueno, Gary no se encontraba cerca de las primeras filas lo que también permitía que no molestara al resto de concurrentes. Lamentablemente la transmisión del sábado se cayó, y muchos no pudimos verla a plenitud. Esa noche PJ había ofrecido en setlist de lujo, con muchas canciones que no son frecuentes en sus repertorios habituales, era una manera de celebrar sus 20 años, ofrecer algo poco común, la ocasión lo ameritaba.
A pesar de la desazón de no haber podido disfrutar completa la noche del sábado, Gary prometió hacer nuevamente lo mismo para el domingo. Cumplió, y esta vez la señal no se perdió, al menos para los que nos conectamos antes ya que según supe luego se saturó y era difícil conectarse. Y aquí comenzó a cumplir un rol primordial la red social, y lo digo con nombre propio, el Facebook. Muchos fans nos unimos a través de la red social para compartir simultáneamente el momento, y así fue, no sólo desde Perú recibía comentarios, mis amigos de otras partes del mundo (tan jammers como yo), compartían su sentir, desde Uruguay, Venezuela, México, Ecuador, Argentina y Chile se sentía plena emoción. El hecho de compartir cada una de las 33 canciones que conformaron el setlist del domingo fue muy grato, la red social permitía que nos sintiéramos juntos a pesar de los kilómetros de distancia que nos separaban los unos de los otros, yo sentía que tenía a mi lado a mi gran amiga uruguaya o a mis panas venezolanos o a mis amigos allá en Chile y obviamente a mis compañeros peruanos en especial mis dos engreídas, a todos ellos los sentí aquí a mi costado, abrazados al mismo sentimiento y extasiados por tanta felicidad. Pero eso no sólo lo logramos gracias al Facebook, sino también a la magia de aquella banda que nos viene regalando los mejores momentos en estos 20 años de carrera, fue una sensación inexplicable. Todos escribíamos comentarios eufóricos, llenos de alegría, el factor común en dichos comentarios era "morí!", "¡genios!", "estoy al borde de las lágrimas" o "estoy llorando".
Es impresionante lo que una banda, lo que cinco sencillos hombres (bueno seis, no nos olvidemos de Booooooom! Gaspar), pueden lograr en sus seguidores, momentos realmente emotivos, que llegaron al éxtasis total cuando el líder de Soundgarden, Chris Cornell, subió al escenario, como ya lo había hecho la noche anterior, y ahí pudimos ver en vivo y en directo el esperado regreso de Temple Of The Dog. También participaron muchos de los artistas invitados como John Doe, Glen Hassard, Julian Casablancas de The Strokes entre otros. La noche anterior además de Cornell había destacado la presencia de Josh Homme el líder de Queens of The Stone Age.
Fue un ir y venir de emociones demasiados fuertes, que se incrementaron al máximo con momentos "clásicos" de Pearl Jam como las interpretaciones de Alive o Yellow Ledbetter y ni que decir cuando Eddie estrenó un tema que escribió ese mismo día, eso ya fue demasiado. Lo más hermoso fue que lo pude compartir con personas a las que quiero mucho a pesar de la distancia y con algunas que ni siquiera tengo el placer de conocer pero que al tener contactos en común en la red social pudimos compartir la experiencia, y nos hicimos amigos apenas conociéndonos, sólo por compartir la misma pasión.
Y esto se hizo extensivo en todos los lugares en los que se pudo apreciar la transmisión de Gary, que a través del chat de su página recibió incluso propuestas de matrimonio, una muestra de la alegría desbordante de tal suceso.

En resumidas cuentas, fue la noche perfecta, la magia de Pearl Jam nos unió a pesar de las distancias, nos emocionó en muchos casos hasta las lágrimas, nos hizo sentir que no nos equivocamos al elegir a nuestra banda favorita, la que llevamos tatuada en la piel.
Gracias Pearl Jam por nuevamente crear un momento único que sólo será superado por la noche del 18 de noviembre en que por fin podré verlos a la cara para agradecérselos personalmente (a pesar de que lo más probable es que mi voz se pierda entre las miles que gritarán lo mismo que yo), una noche en donde no existirán las distancias ni con la banda ni con mis amigos ya que algunos de ellos vendrán a compartir la experiencia única de ver a Pearl Jam en Lima y no podría ser más feliz por ello.
Y no me puedo olvidar, gracias a Gary por ser el artífice de una noche especial, realmente te has ganado el cariño de mucha gente alrededor del mundo.
Ahora sólo nos queda esperar unos pocos meses, semanas, por ahora sólo haré lo que escribí ayer tras terminar la noche: "Bueno, luego de este concierto he muerto, no me lloren, regreso para noviembre". Así lo estoy haciendo, es mi espíritu o lo que quedó de mí el que escribe estas líneas.

Nos vemos en noviembre. Que así sea.


Momento en el que Eddie presenta su última creación




jueves, 1 de septiembre de 2011

Red Hot Chili Peppers, I'm With You (2011): El "Factor Frusciante" y los residuos del pasado

Debo ser completamente sincero, cuando supe de la partida de John Frusciante muchas cosas pasaron por mi cabeza sobre el futuro de Red Hot Chili Peppers, y la mayoría de pensamientos que me invadieron fueron negativos. RHCP estaba perdiendo su alma, más allá de lo gran letrista que es Anthony Kiedis, se estaba yendo su complemento perfecto. Frusciante no sólo como guitarrista sino como corista y en algunos casos compositor demostró que era el integrante de la banda más talentoso, incluso más que Kiedis, ya que trascendió a la banda con algunos proyectos personales y colaboraciones.
Pero ya todo estaba dicho, John se fue y en su reemplazo llegó, Josh Klinghoffer, quien es amigo del propio Frusciante y que ya había tocado con la banda al final de la gira del álbum anterior Stadium Arcadium. Este músico no es cualquier guitarrista, ha trabajado con muchos artistas de renombre como Beck, Butthole Surfers, PJ Harvey, entre otros, por lo que al menos el lugar era ocupado por alguien solvente musicalmente hablando y que al conocer tan bien a John podía saber que es lo que la banda iba a pretender de él.
Y así con este nuevo integrante los RHCP han editado I'm With You, su nuevo trabajo luego de cinco largos años del aclamado disco doble Stadium Arcadium.
Aún con todo lo expuesto anteriormente mis temores seguían latentes, porque una pieza clave ya no estaba. Finalmente luego de escuchar más de una vez el álbum, creo que mi negativismo se disipó lo que no quiere decir que quedara enteramente satisfecho con el resultado final del disco.

El disco contiene catorce tracks similares entre sí en muchos aspectos, que inicia con Monarchy of Roses que tiene empieza de manera peculiar, con su sonido distorsionado al que le sigue una melodía más rítmica para luego distorsionarse nuevamente. Arranque con potencia pero sin estridencia.
Seguidamente Factory of Faith se deja llevar por el magistral bajo de Flea que es el que lleva la batuta en este single. Track sencillo con la marca de los Peppers tatuada en toda la canción.
Brendan's Death Song tiene un génesis acústico acompañado por la impecable voz de Kiedis, poco a poco la canción adquiere mayor fuerza gracias a la batería de Chad Smith, estableciéndose como uno de los tracks mejor trabajados de la placa.
Nuevamente el bajo de Flea manda y ordena, esta vez en Ethiopia, donde también se percibe unos breves intentos por parte de Klinghoffer de emular y evocar a Frusciante, mientras Kiedis hace lo suyo jugando con su gran capacidad vocal.
En Annie Wants a Baby nuevamente la responsabilidad y peso de la canción recae en Flea y Chad, aunque el track no llega a despegar del todo quedándose en buenas intenciones.
Look Around es el primer gran momento del álbum, donde se aprecia a los RHCP en todo su esplendor, un momento clásico y a la vez actual. Funk contemporáneo.
El sencillo de promoción de este trabajo fue The Adventures Of Rain Dance Maggie, que al igual que el tema que lo precede en el disco, contiene toda la esencia de los RHCP. Otro de los grandes momentos de la placa.
Al compás de un ritmo semi-tropical Did I Let You Know, es un tema simpático,que se deja escuchar y que mantiene la línea musical general del álbum, añadiéndole en esta oportunidad la presencia de trompetas que logran que la atmósfera sea aún más alegre.
Con Goodbye Hooray nos topamos con un funk con más energía pero que a pesar de ello no llega a consolidarse. No obnstante tiene una buena base melódica, un track de altas y bajas.
Happiness Loves Company es un tema simple que por momentos se mueve al ritmo de una "semi" marcha militar a cargo de la batería de Chad. Entretenida.
Police Station es el tercer gran momento de la obra, canción que consiste en un funk rítmico, incluso por momentos sensual, un track que seduce.
Una canción demasiado elaborada encontramos con Even You Brutus?, justamente ese detalle, esa complejidad, hace que no pueda afianzarse.
Vuelve la pausa y la sencillez con Meet Me at the Corner que hace claras reminiscencias a Stadium Arcadium. Y eso es algo que se percibe a lo largo de la obra.
El punto final del disco lo pone Dance, Dance, Dance, un buen cierre, lleno de cadencia, su sencillez lo hace agradable al oído.

RHCP ha vuelto, no diré con un discazo, porque no lo es, está lejos de los años de gloria, quizás el defecto es que algunas canciones parecen ser descartes del Stadium Arcadium, y es evidente que la ausencia de John produce que este trabajo no deslumbre del todo. RHCP tiene como tarea pendiente, reinventarse, no sonar tan parecidos a ellos mismos. Al menos el resultado no es para nada malo ni flojo ya que justamente esa similitud con su pasado da como consecuencia un disco amable y cálido, como lo ha sido toda su carrera, aunque al escucharlo sienta como que lo que oigo no me sorprende y que era lo que me esperaba, es quizás por ello que no siento que el disco brille, no me enamora del todo pero sí me gusta, no tanto como sus anteriores joyas, pero sí me gusta. Creo que este álbum es un nuevo gancho para lo que deseen asistir al concierto de la banda aquí en Lima, para ese propósito funciona perfectamente. Además, esto ya está sucediendo, el disco es considerado uno de los mejores del año porque la calidad musical no está en duda, lo que falta es innovación y dejar de vivir de los residuos del pasado.


The Adventures Of Rain Dance Maggie



Look Around



Police Station